Papa Francisco

Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado 2.015.

Dice el Papa Francisco: “La Misión de la Iglesia, peregrina en la tierra y madre de todos, es por tanto amar a Jesucristo, adorarlo y amarlo, especialmente en los más pobres y desamparados; entre éstos, están ciertamente los emigrantes y los refugiados, que intentan dejar atrás difíciles condiciones de vida y todo tipo de peligro. Por eso, el lema de la Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado de este año es: Una Iglesia sin fronteras, madre de todos”. “La Iglesia abre sus brazos para acoger a todos los pueblos, sin discriminaciones y sin límites, y para anunciar a todos que “Dios es amor” (1 Jn. 4, 8. 16)”. “….Jesucristo espera siempre que lo reconozcamos en los emigrantes y en los desplazados, en los refugiados y en los exiliados, y asimismo nos llama a compartir nuestros recursos, y en ocasiones, a renunciar a nuestro bienestar” (Papa Francisco, mensaje para esta Jornada del Emigrante y del Refugiado 2015). Estas palabras del Santo Padre nos invitan reiteradamente: 1. A la renuncia de sí mismos. 2. A unir esfuerzos: No podemos contentarnos con la mera tolerancia. En la comunidad cristiana no caben reticencias que impidan a dificulten acoger a personas de procedencia y culturas diferentes. 3. A ofrecer espacios de intercambio para compartir líneas de trabajo y experiencias desde la identidad y misión propia. 4. A reflexionar juntos para realizar más eficazmente la tarea y para diseñar camino de futuro. 5. A avanzar en la coordinación y la colaboración trabajando en comunión. Esta es una dimensión integrante y un testimonio muy significante, en medio de un mundo dividido, de nuestra identidad eclesial (Mensaje de los Obispos Españoles para esta Jornada Mundial del Emigrante y del Refugiado 2.015).